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18de septiembre: El amanecer de Chile



Proclamación de la independencia


Cuando amanecía la Patria, el 18 de septiembre de 1810,  hombres y mujeres nacidos en Chile veían concretado uno de los primeros pasos hacia la Independencia de su terruño. No fue algo espontáneo, ni excepcional, pues la preparación de la Independencia de América se venía fraguando más una década antes y a la cabeza de este movimiento estaba Francisco de Miranda. El grupo subversivo que crearon para realizar la revolución americana se conoció como la "Logia Lautaro", en honor al toqui araucano que resistió y combatió a la corona española. Es necesario clarificar que le dan el nombre de logia, porque era la mejor manera de enfrentar el reto que venía y la más segura, probada contemporáneamente. Y es menester decir, que no eran una logia masónica, sino revolucionaria, como queda estampado por O'Higgins en el acta de la Independencia de Chile. Es por esta razón, que dentro de la logia estaban afiliados sacerdotes.


 
          

                 Toqui Lautaro                            O'Higgins                  


Los hombres que componían este grupo fueron el soporte de los futuros cabildos y de la lucha posterior por la independencia total del yugo español en las tierras coloniales. O'Higgins, San Martín, José Cortes de Madariaga, Camilo Henríquez y muchos otros, fueron estos hombres. Hubo otros más, que carecían de la visión americana de la Independencia, pero que ardían en liberar sólo a su propio territorio. Estas dos visiones, que eran una, impulsaron y lograron imponerse a los realistas en la América Española.


Los símbolos fueron el primer vestigio de que cambiaba la sociedad, ya nada podía ser lo mismo, aunque destruyeran esos mismos símbolos. Antecedían al cambio en las mentes de las personas que poblaban estas tierras. Aquel que caía luchando por bandera de su país, era libre, y lo hacía para que fueran libres sus hijos.


Estos nuevos hombres eran los superadores de ambas razas, y sangre de ambas razas corrían por sus venas. Ya no eran españoles, ya no eran indígenas; eran americanos.


Bernardo O'Higgins nos muestra el camino de estos hombres nuevos, nacido en Chile, hijo de una chilena y un irlandés, que llegó a ser virrey del Perú, estudió con indígenas en Chillán, luego pasó a Perú y finalmente, terminó sus estudios en Inglaterra. Fue uno de los hombres más cultos de su época, que se dio cuenta que él era parte de una nueva etapa y que estaban destinados a liberar, física y mentalmente, a los hombres y mujeres de América, incluyendo españoles e indígenas


.Para que una revolución triunfe, debe tener un carácter amplio, universalista. La revolución americana lo tenía, por eso triunfó. Pero quedó oculta, por los mismos americanos que no cambiaron totalmente y que luego se apropiaron del poder. La revolución americana, todavía no se ha acabado, pues todavía se lucha por lo mismo que lucharon los Libertadores.



           

                         Bandera de O'Higgins                   Estrella inclinada y dentro de ella la wünelfe.


A fines de 1817, nace la bandera nacional de la patria nueva. Su estructura es diferente a otras, pese a eso también incluye el escudo al centro. Lo peculiar es una estrella inclinada y dentro de ella, reforzándola, la wünelfe. La connotación de este emblema, por sí mismo es notable, pues representa al país. Chile esta reflejado; es una "estrella de plata", "la estrella de Arauco", "la estrella solitaria", no hay dobles interpretaciones de lo que representa la estrella. La wünelfe, internamente completa la estrella con sus puntas. El mismo carácter se integra posteriormente al escudo patrio, la estrella en dos campos, los reúne y los hace uno.


Por esa razón, en nuestro caso, el mejor y más alto símbolo de la patria, fue y sigue siendo la bandera de O'Higgins, la misma con que declarará la Independencia de Chile en las afueras de Talcahuano, la de la batalla de Maipú, de la Expedición Libertadora del Perú, la de la Guerra contra la Confederación Perú-boliviana, de la Guerra contra España de 1865, de la Guerra del Pacífico, de la Guerra Civil de 1891, la de las primeras luchas obreras, etc.


Es el único que representa lo que fuimos, lo que somos y seremos. No somos indígenas, ni europeos, somos americanos y chilenos. Representa la solidaridad con la causa americana, la idea de una Nueva América. Pero hemos debido recorrer ese camino, no siempre con buenos conductores ni dirigentes, que nos han llevado a confrontarnos con otros americanos y nuestra bandera ha tenido que sostener con orgullo, cualquier crítica a nuestro pueblo.


Nuestra bandera,nació para representar a los chilenos. Las tergiversaciones posteriores de la enseña patria, han sido ejecutadas muchas veces por ignorancia, pero las más de las veces por manipulación. Hoy día la bandera que flamea, aunque conserva físicamente la estructura de la primera, mental y moralmente no es nuestra bandera. No representa nada, es fatua, está vacía de simbolismo, incluso para nosotros es difícil explicar que representa cada color, por qué tiene esa estructura o qué representa la estrella. Y lo importante es que sabemos que falta algo, que debe representar algo más que desconocemos. Y que queremos que represente.


La superación de cualquier símbolo, no puede hacerse por decreto, por ignorancia. La superación se debe hacer porque el emblema superó sus inicios, hubo un desarrollo en el pueblo que obligó a cambiarlo. Y eso todavía no ha ocurrido con nuestros símbolos, y con uno de ellos en especial, con la bandera chilena, la bandera de O'Higgins.